viernes, 18 de mayo de 2007

Otro viernes varada

Si ya sé, me lo perdí, me lo estoy perdiendo. Que hueva de Citla que no quiere hacer nada. La lluvia me atrapó, estaba ya muy puesta para la chela (o lo que sea que se tome en ese lugar llamado Carlos & Charlies, que para mi sigue siendo un misterio) cuando empezó a llover y mi techito de lámina retumbó con el granizo. Tromba, ventanas semi cerradas que produjeron charcos en las esquinas de mi queridísima covacha. Ahorita estoy sacando el agua con un trapo y una cubeta. El tiempo de lluvias para mi siempre es una calamidad.
Y que me da la crisis. Puta madre, ya mero termino la escuela. Y luego el limbo. Uno tiene que elegir hacer cosas, mantenerse en movimiento. La banda enapilla anda saliendo mucho. Cada fin de semana una pachanga por lo menos. O un bar entre semana (ese nuevo collage que mmm no está mal. Caguama 20 varos). Creo que es por nostalgia, quién sabe dónde terminemos después.
Y eso me llevó a otra crisis. Es final de semestre. Púchala. La época del año en que uno descubre sus habilidades noctámbulas y confirma teorías acerca del café, la cocacola + aspirina y aplica más de una vez el redbullazo. Y mírenme, acá escribeindo en el blog, viendo películas, rascándome la cabeza y planeando a dónde ir a pasear mañana. La deliciosa y sencilla vida del estudiante. Maldita maldición, cómo la voy a extrañar.
Niza y chela ladran. Imagino que alguien viene de visita y perdemos el tiempo jugando monopoly de los simpsons y tomando cerveza. Estaría padre.

1 comentario:

Rattenjunge dijo...

Siempre puede ser peor: ir a la escuela y descubrir que en todo el viernes no tuviste ni una sola clase y que además te llueva. O inclusive peor: No ir a clase el viernes, pasártela aburrido y solo; y tener que ir a una aburrida clase sabatina a las 9 de la mañana para descubrir lo aburrido que estuvo el día anterior y bien aburrido y solo porque tu amiga decidió no ir a clase ese día.